Tras denunciar que ha sido víctima de persecución política por parte del gobierno panista de Guanajuato, la ex alcaldesa de León, Guanajuato, Bárbara Botello Santibañez, del PRI, presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR), por considerar que fueron violentados sus derechos en el proceso de detención que sufrió el pasado 30 de mayo, “con prepotencia y brutalidad”, acusada del delito de peculado, por parte de la Fiscalía estatal.

Explicó que cuando fue detenida, gozaba de la protección de la justicia federal a través de un auto de suspensión del acto reclamado y a pesar de que la Fiscalía de Guanajuato lo sabía procedieron a su detención, lo cual es un delito federal. “En Guanajuato, el estado de derecho es vulnerado por un gobierno autoritario, que aplica la justicia selectiva, que persigue a sus enemigos políticos y que deja impunes a los delincuentes”, dijo.

Comentó que “desde hace más de 10 años, los panistas no han cesado de perseguirme. He sido denunciada electoralmente, civilmente, administrativamente, penalmente. Han ordenado auditorías que a nadie más le han hecho. Han hecho uso de todo el aparato del Estado para lastimarme en venganza por haberme atrevido a ganarles la elección”.

En un escrito, dado a conocer a los medios de comunicación, apuntó que decidió levantar la voz “porque considero injusto que un grupo político que detenta el poder desde hace ya treinta años en Guanajuato, sea capaz de afectar los derechos y la integridad de quienes tienen otra postura política”.

Resaltó que en el afán de dañarla, han afectado a quienes fueron sus colaboradores a quienes han sometido a procesos civiles, administrativos y penales con toda clase de artimañas y perversidad.

“Desde que fui detenida, he vivido con miedo por lo que puedan hacer en mi contra. Temo por mi seguridad y por la integridad mía, de mi familia y de mis colaboradores cercanos. De tal manera que si algo nos llega a ocurrir hago responsable al gobernador del Estado y al Fiscal General del Estado”, apuntó.